Habitación

Estoy en mi habitación. Tengo ganas de excitarme. Busco a mi Asistente Sexual. Me excito con él; ya no es mi Asistente.

Tú, andas en mi búsqueda. Yo, busco mi placer a través de las manos de ese alguien que juega sexualmente conmigo, y me toca; y…, haciendo cibersexo contigo.

Quiero tocar, oler, sentir, ver cómo mi cuerpo se mueve más rápidamente, percibir tu respiración y deseo. ¡Ven!.

Necesito fantasear que somos tres, practicando sexo. Nuestros cuerpos son diferentes. Nuestra lujuria también lo es. Acaricia mi silla de ruedas con tu lengua lasciva y maldita; que eso, te pone cachondx. Creemos una atmósfera caliente, donde el ardor se impregne en nuestras pieles sudorosas.

El látigo y la masturbación, junto con el jadeo, constituyen ese baile que tanto ansío…, sólo, cuando me apetece. ¡Vete!.